En la opinión de J. Luis Ahuactzin
A casi 15 días del anuncio por el secretario de Seguridad Ciudadana Alberto Perea Marrufo, por la «nueva estrategia» de blindaje en la zona sur del estado, evidenció su incapacidad para mantenerse al frente de la dependencia, pues MINTIÓ a los tlaxcaltecas sobre que la entidad es «tiradero» de cadáveres.
¡No los tiran, aquí los matan!
No hay peor ciego que el que no quiere ver… Pero el pinocho secretario ya se le están haciendo costumbre las mentiras.
Está semana que comenzó por ejemplo, el periodista Edgar Gallegos, intentó una entrevista con el marino Perea Marrufo, para saber cuál era la JUSTIFICACIÓN por los homicidios y embolsados, cuando asistió al homenaje del lábaro patrio, pero al concluir el funcionario salió huyendo y solo dijo que no daba entrevista, porque al día siguiente habría una conferencia de prensa donde explicarían las muertes, pero nunca llegó la versión oficial.
El pasado 27 de agosto el pinocho realizó el anuncio de su estrategia de «blindaje» en la zona fronteriza con Puebla; y solo en lo que va de septiembre han ocurrido al menos 10 asesinatos, uno por día, y pese a ello el gobierno insiste que es un mes «atípico»; como si se tratara de temporadas climatológicas.
Sus incipientes resultados y sus cientos de cámaras de videovigilancia, su enorme pantalla y su Frankenstein móvil de vigilancia que tanto presumieron, han sido un fiasco para el gobierno lorenista, que la misma inquilina de Palacio de Gobierno tiene que dar su versión en medios de circulación nacional, porque en Tlaxcala ya perdió credibilidad.
Incluso, a raíz del cambio de vocero estatal, de Augusto Ramírez a Octavio Ortega, la llegada de un segundo foráneo -de la CDMX- pretenden hacer creer que en Tlaxcala no hay verdaderos profesionales de la comunicación, pero en realidad es el gobierno cuya imagen está en declive por su inexistente política pública en materia de (in) seguridad.
Trascendidos
-Será cierto que en los últimos días de agosto, tanto Homero y Cutberto, dejaron a su suerte a los funcionarios educativos que se fueron a Huatulco, Oaxaca, en su viaje de paseo disfrazado de actualización magisterial…
– Que en dicho viaje, vivieron la peor de sus experiencias porque los vehículos no llevaban clima, quedaron varados y sus alimentos eran cacahuates y refrescos, como viles primates…
– Los señores y señoras, funcionarios de la SEP – SET, desocuparon el lujoso hotel al medio día del 30 de agosto, pero salieron hasta las 16 horas de Huatulco y arribaron a Tlaxcala pasada la media noche, mentando madres a sus superiores por el accidentado viaje…