Por J. Luis Ahuactzin
A las 11 de la mañana comenzó el repique de las campanas de San Agustín en Tlaxco, que anunciaba el luto por el asesinato de un policía municipal en cumplimiento de su deber el domingo por la noche, Aristeo N.
El cortejo fúnebre arribó al acceso principal de San Agustín, donde familiares, amigos, y demás seres queridos, aguardaban para ingresar a la ceremonia religiosa de cuerpo presente.
Una vez que concluyó la misa, el ataúd fue llevado hasta las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública municipal, donde se realizó el pase de lista.
En el lugar, se montó una guardia por la presidenta municipal, Diana Torrejón, e integrantes del cabildo, mismos que lamentaban el deceso.
Tras la ceremonia de homenaje, el cuerpo de Aristeo partió hacia el panteón para la cristiana sepultura, y se informó que los elementos municipales cuentan con seguro de vida, sueldo homologado, armamento, como chalecos balísticos.
Incluso, se informó que el elemento municipal ingresó a la corporación en Tlaxco en enero pasado y su acreditación y permiso para portar arma llevan un proceso.