Por J. Luis Ahuactzin
Se trata de Álvaro Carrillo Cortés, quien es candidato a magistrado del Vigésimo Octavo Circuito con sede en Tlaxcala, y quien en el 2010 fue cesado de funciones de juez federal, por corrupción.
El exfuncionario fue separado de sus funciones en el 2010, derivado de un acuerdo del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), tras detectar que en el 2007 «fue sancionado con suspensión de un año sin goce de sueldo, al incurrir en faltas graves por notorio descuido en el trámite de 66 amparos (…)».
Luego señala que «En la mayoría de esos casos, Carrillo desechó demandas ilegalmente o puso otros obstáculos injustificados para tramitar los asuntos (…)», se detalló a través del Diario de Chihuahua.
Bajo esos argumentos, entre otros, el CJF tomó en cuenta el alto porcentaje de sentencias que fue modificado o revocado por tribunales superiores, que fue empeorando conforme Carrillo pasó por juzgados federales en Monterrey, Oaxaca y Tapachula.
El ahora candidato ocupa el lugar número 9 de 21 aspirantes al cargo de magistrados de circuito, en este caso al que corresponde Tlaxcala, el 28.