En la Opinión de J. Luis Ahuactzin
La alcaldesa de Tlaxco, Diana Torrejón Rodríguez, tomó una determinación acertada al remover al director de Seguridad Pública, Francisco Javier Carreto, quien presentaba pírricos resultados en la materia.
Carreto, viene desde la administración del excalde, ahora perseguido por la Auditoría Superior de la Federación ante un desfalco millonario, Jorge Corichi Fragoso, y en su haber como servidor público trae negativos más que golpes certeros.
El señor, al estilo chaparrón, ante su inexperiencia o navatez, que al caso es lo mismo, hasta en un operativo de alcoholímetro en la capital fue atropellado (…).
El ahora exfuncionario, quien está ligado al grupo de protegidos del Max policía, quedó exhibido como un don nadie, ya que su «experiencia» la pretendía basar en sus cargos anteriores.
Es decir, según él, por haber sido director de seguridad en los ayuntamientos como Tlaxcala, Huamantla, Apetatitlán y Tlaxco, de todos estos ha salido despedido (…) ¿Por qué será?
Casualmente, en estos municipios la delincuencia no fue frenada y, todo lo contrario, según los indicadores del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, aumentó la tasa delictiva.
Si bien, el discurso del Estado más seguro del país, ya pasó de la gracia ciudadana a la preocupación, pues el discurso nadie se los cree.
Carreto aún debe una explicación de los hechos del asesinato al elemento municipal, pues el rumor cobra fuerza de que sí estaba armado y sin tener una evaluación ni permiso para portar arma la tenía; nadie ha aclarado lo ocurrido, pero el rumor señala que el elemento fue desarmado y acribillado con la misma arma de cargo (…)
Díana Torrejón, acertó en aceptar el mando coordinado, para comenzar a poner orden, primero en la corporación y luego en la región; incluso, está obligada a hacer una limpia o evaluación policial en el municipio.
Torrejón comenzó a fajarse el pantalón con el despido de Carreto, y así deberá seguir hasta lograr una policía no solamente certificada sino confiable a la ciudadanía, ante las críticas y señalamientos; al final ella será juzgada y no sus subordinados.
Incluso, este hecho deberá servir para que el resto de funcionarios de su gabinete, pongan sus barbas remojar o de lo contrario serán también despedidos; este es un mensaje para que las administraciones recompongan sus errores a 6 meses de haber asumido funciones como «nuevas» autoridades municipales.
Desde el año pasado comenzó con la homologación salarial a policías, adquisición de un seguro de vida, de material para protección y seguridad de los elementos, y solo falta su evaluación total en exámenes de control de confianza que era responsabilidad de Carreto y no cumplió.
TRASCENDIDOS
– ¿Será cierto que el regidor capitalino de Morena, golpeador de su esposa, anda con la cola entre las patas, urgido de un «acuerdo» marital para no ir a la cárcel…?
– En esa urgencia, trascendió que para no pisar el CERESO, se mantiene escondido cual guarida de roedor y niega su presencia para ser notificado por cualquier promoción…